En nuestra práctica profesional hemos observado algunas dudas que padres/madres primerizos y no tan primerizos pueden llegar a mostrarnos. Con este artículo queremos resolver estas pequeñas dudas.
ANDADOR ¿es bueno o malo?:
Todos recordamos como hace unos años ver a un bebe, que no andaba autónomamente, colocado en un andador era algo totalmente normal y generalizado. Supuestamente ayudaba al niñ@ a andar.
Hoy en día se sabe que los andadores no ayudan a andar y son perjudiciales para el correcto desarrollo de los miembros inferiores.
No ayudan a establecer la marcha ya que no se soporta el correcto porcentaje de peso en las caderas. Además, los miembros inferiores no están correctamente alineados por lo que las caderas, rodillas y pies pueden sufrir alteraciones músculo esqueléticas. La espalda también se puede ver resentida por esta incorrecta alineación.
La Asociación Española de Pediatría, recomienda no usar el andador afirmando que: “el mejor andador es el que no se usa”.
También debemos añadir el mayor riesgo de fracturas por el aumento del índice de caídas que presenta el uso de dicho dispositivo.
Ya hay países que han prohibido su venta para que su población infantil no lo use, como es el caso de Brasil y Canadá.
Por todo esto os animamos a que no lo useis, porque a pesar de que muchos de nosotr@s lo hemos podido utilizar sin tener ningún problema, ya son conocidas las contraindicaciones y es mejor evitar.
¿Entonces qué puedo hacer para estimular a mi bebé?
Es muy importante ser conscientes de que no hay dos bebés iguales. Cada uno tiene su ritmo, y siempre habrá niñ@s que adquieran destrezas más fácilmente y otr@s a los que les cueste más, (siempre, por supuesto estamos hablando de casos en los que no haya ningún problema de base que pueda ralentizar el aprendizaje).
Debido a lo anteriormente dicho, las comparaciones no son adecuadas, ya que si un bebé gatea a los 8 meses y otro a los 10, ¿cuál de los dos lo ha hecho en el momento adecuado?. Si bien es cierto que las escalas de desarrollo se basan en porcentajes en la población infantil, mientras un bebé vaya adquiriendo ítems del desarrollo, no es preocupante un pequeño retraso en la adquisición de éstos ya que puede ser debido simplemente por un componente de inmadurez.
Últimamente por miedos o por falta de tiempo , ya que vivimos en una sociedad donde pararnos a jugar con nuestros hij@s es un lujo, observo retrasos en el desarrollo de los niñ@s que son debidos a una falta de estimulación.
Los bebés aprenden con el movimiento y hay un aumento de uso de dispositivos como por ejemplo hamacas para tener a nuestros hij@s seguros mientras estamos haciendo diversas tareas. Os animo a que disfrutéis más de ellos y os permitáis tiempo para ayudarles a explorar el movimiento, y eso no se hace de otra manera que ofreciéndoles espacio y motivación. Una gran manera es poniéndonos nosotros y a ell@s en el suelo y colocar juguetes que les atraigan (dependiendo de la edad del bebé se deberá estimular el alcance a objetos boca arriba, o boca abajo, o cuadrupedia,…..).
No tengáis miedo al suelo, si pensáis que hace frío, se puede poner un tatami que les resguarde de él. Y sobretodo, a edades muy tempranas será imprescindible permanecer siempre a su lado ayudándoles y controlando la situación.
Esta sociedad en la que nos encontramos nos está limitando cosas tan básicas como disponer de tiempo para jugar, y el juego es la manera en la que los niñ@s aprenden , así que os animo a que lo fomentéis desde las primeras etapas de sus vidas.
¡¡¡APRENDEMOS JUGANDO!!!
«Los juegos son la forma más elevada de la investigación» Albert Einstein
